En el mundo, 60 millones de niñas no asisten a la escuela. A causa de su sexo, entre 60 y 100 millones de niñas fueron víctimas de feticidios, infanticidios, desnutrición y mala atención médica. Más del 90 por ciento de las empleadas domésticas son niñas de entre 12 y 17 años. En algunas regiones del mundo, el porcentaje de seropositividad al virus del Sida es cinco veces mayor entre las niñas que entre los varones. Por estas razones, Visión Mundial empezó a trabajar desde 1991 en el tema de «La Niña» como una iniciativa internacional que establece como prioridad el apoyo al desarrollo y al ejercicio de sus derechos, informa un boletín de la organización. Pero, a pesar de los esfuerzos, aún entre las ONG las niñas continúan siendo invisibles en las estadísticas y por las estadísticas. Además, la educación bajo roles asignados produce en niñas y varones comportamientos aprendidos que limitarán su desarrollo personal y su propia autoestima. Esta forma de socialización provee las normas -ambas implícitas y explícitas- para las prácticas discriminatorias tradicionales que se perpetúan con el tiempo y se hacen costumbre. Hablar de la situación de las niñas es también proyectarse a la de las mujeres adultas. Los estudios revelan que la discriminación lleva a la violencia que se inicia desde muy temprana edad y se perpetúa en la adultez, siendo diversas las manifestaciones de violencia durante el ciclo de vida de esta población (CIMAC)
2007-03-02