La introducción de pequeños programas de desarrollo devuelven el valor y la confianza perdida a miles de guatemaltecas en lugares donde la cultura machista les impide acudir a una escuela, trabajar fuera de la casa e, incluso, controlar el número de embarazos. Por lo menos así lo ha comprobado el no gubernamental organismo internacional ActionAid, que ha logrado que unas 2.000 mujeres se integren a sus proyectos de desarrollo comunitario en un sitio ubicado en el oriente de este país, donde ellas se casan a los 14 años de edad y llegan a tener 15 hijos antes de cumplir los 40. Incluso, se logró que 50 de ellas salieran de su localidad, como nunca antes, a la marcha programada en la ciudad el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, para exigir sus derechos. El trabajo de romper con los patrones culturales en esas comunidades no es tarea fácil. En el oriente y occidentedel país centroamericano, las mujeres todavía viven en sociedades señaladas por los grupos feministas como medievales, se les golpea como forma de aprecio y permanecen en casa por orden de su pareja, quien también les ordena cómo vestir. Abelina Monzón Orozco, del no gubernamental Foro Nacional de la Mujer, comenta que eso y el analfabetismo son dos factores que impiden la participación de este sector poblacional en el desarrollo de sus comunidades (SEMlac)
2008-04-04