Las cubanas viven más años, pero llegan a edades avanzadas de la vida en peores condiciones de salud que los hombres. Así lo evidenciaron los resultados de una Encuesta Nacional de Envejecimiento Poblacional (ENEP), aplicada en la nación caribeña en 2017.
Más de cinco años después, este es un hecho que se hace palpable en la vida cotidiana de miles de mujeres a lo largo del país y al cual las estadísticas continúan apuntando.
El Anuario Estadístico de salud de 2022 indicó que los hombres tienen una esperanza de vida de 75,36 años, mientras que las mujeres llegan a un promedio de 80,15.
Sin embargo, al analizar aspectos como la prevalencia de diabetes, encontramos 76,8 por cada mil mujeres frente a 56 para el caso de los hombres. Para la hipertensión arterial los datos son de 247 mujeres por cada mil y 210 por cada mil en el caso de los hombres.
Hablamos de dos de las enfermedades crónicas que más padecen cubanas y cubanos, asociadas a las principales causas de muerte para ambos sexos.
Sobre cómo influyen los estereotipos, los modos de vida aprendidos y las desventajas sociales en la salud y la sobrevivencia de las cubanas, hablamos en esta nueva edición de La Nota.
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