Autoridades de salud amplían asistencia a la infertilidad

Cuba amplía sus servicios para la reproducción asistida entre las principales acciones que se desarrollan en Cuba para atender los problemas de infertilidad, informaron expertos y autoridades de salud.

Con una demanda creciente y acumulada, la infertilidad en la isla empieza a contar también con servicios municipales para la atención y prevención de este problema, agregaron los especialistas el jueves 14 de febrero, durante un programa televisivo de cobertura nacional.

Además de un centro de reproducción asistida de alta tecnología que actualmente funciona en el Hospital Hermanos Ameijeiras, en la capital cubana, se abrirán tres nuevos centros de ese tipo en las provincias de Holguín, Cienfuegos y otro en La Habana, para cubrir las regiones occidental, central y oriental del país.
A la par, se mejoran los servicios municipales de atención a la pareja infértil, 168 en todo el país, y se trabaja en el desarrollo de servicios de baja tecnología en varias provincias.
«Este programa de atención integral a la pareja infértil obedece a la necesidad de transformar el panorama demográfico de baja fecundidad», señaló el pediatra Roberto Álvarez Fumero, jefe del departamento materno infantil del Ministerio de Salud Pública (Minsap).

Cuba posee una de las tasas de fecundidad más bajas de la región, similar a la de países desarrollados, lo que junto a otras variables demográficas ha influido en la reducción y envejecimiento progresivo de su población.
Desde 1978 las cubanas no cumplen con el nivel de reemplazo, lo que significa que, al final de su vida reproductiva, no dejan una hija que las sustituyan en su función reproductora.
El programa en curso busca garantizar la atención de las principales causas biológicas de la infertilidad -que es multifactorial-, con un enfoque preventivo dirigido a disminuir las condiciones que la propician y desde la asistencia médica de calidad, agregó el funcionario.
Entre las medidas preventivas mencionó la reducción de los embarazos no deseados y de sus interrupciones, asociadas a riesgos de infertilidad, así como el mejoramiento de la tipología y cobertura de la anticoncepción, que se considera alta pero no cubre la demanda.
En ese último aspecto se pretende elevar el uso de métodos hormonales inyectables, orales y garantizar la anticoncepción de emergencia, en detrimento del uso de dispositivos intrauterinos que pueden provocar infecciones que asciendan y luego desemboquen en infertilidad en las mujeres.
Además de garantizar medidas para incrementar la educación integral de la sexualidad, el programa se enfoca al perfeccionamiento del proceso de concepción voluntaria del embarazo.
Para 2015 se estima que 80 por ciento de los abortos, que en Cuba se realizan totalmente en instituciones de salud y por personal especializado, se hagan por vía medicamentosa, lo que reduce aún más el riesgo de anestesias, curetaje e infecciones, sostuvo Fumero.
Miguel Aguilar, integrante de la comisión nacional de atención a la pareja infértil, precisó que se estima que alrededor de 290.000 parejas tienen algún problema para tener un hijo, aunque es posible que no todas estén interesadas en tenerlos.
La incapacidad para concebir al cabo de un año de relaciones es un trastorno que afecta mundialmente del 12 al 15 por ciento de la población en edad fértil, agregó el médico.
Entre las causas comunes para ambos sexos están los trastornos hipofisiarios, pero también influyen múltiples causas, como la mala calidad de los espermatozoides y afecciones testiculares en los hombres y los daños uterinos, obstrucciones tubáricas e infecciones en las mujeres.
Dos infecciones con alta incidencia en la obstrucción tubárica femenina son la gonorrea y la clamidia, que se adquieren por transmisión sexual y la pueden padecer entre 15 y 20 por ciento de la población sexualmente activa.
Rogelio González, ginecobstetra que atiende este programa en la región occidental del país, indicó que en 2012 los servicios municipales de infertilidad atendieron a 46.971 parejas, se realizaron 14.380 procedimientos de baja tecnología y 903 de alta tecnología.
El pasado año se atendió a más de 400 parejas en el centro de alta tecnología de la capital cubana, donde se lograron más de 237 transferencias embrionarias y se lograron 33 embarazos.